En el distrito de L’ Eixample, en lo que fueron arrabales extramuros al sur de Valencia hasta mediados del siglo XIX, se ubica el Barrio de Ruzafa. Es ejemplo clásico de antigua zona agrícola absorbida por la urbe y sometida, en los últimos años, a un proceso de gentrificación que ha transformado su carácter inmigrante y popular en el barrio hípster de la ciudad.
Situado al sur del centro, y limitado por la Avenida Reino de Valencia. Fue un municipio independiente hasta 1877 y todavía preserva edificaciones históricas.
Sin duda, el corazón de Ruzafa es su Mercado municipal, que marca el ritmo de la vida cotidiana del barrio desde su inauguración en 1957. Merece la pena acercarse una mañana a este lugar donde todavía se respira la esencia de barrio popular y recrearse ante los expositores de sus puestos, donde podemos comprar las mejores materias primas y delicatesen típicamente mediterráneas, como un paté de berenjenas con chile o unos pimientos rellenos de queso feta.
Y el bar del mercado nos ofrece otro aliciente: su famoso Esmorzaret, un brutal y energético almuerzo valenciano que es tradición en estos lares desde los tiempos en los que la gente trabajaba en el campo.
Frente a este colorido mercado encontramos la iglesia de San Valero y San Vicente Mártir, se asienta sobre un templo anterior desaparecido en el siglo XV, lo que da una idea de la antigüedad del núcleo de población de Ruzafa.
En los alrededores también podemos visitar el Convento de Nuestra Señora de los Ángeles, que se asienta en el lugar donde Zayán, el último rey musulmán de Valencia, firmó el 29 de septiembre de 1238 la Rendición de la Ciudad, ante Jaume I.
Ruzafa, el barrio de moda
En apenas una década, la confluencia de culturas ha generado toda una revolución en El barrio de Ruzafa, que va del comercio a la gastronomía, pasando por la cultura y el ocio. La vida tiene otro ritmo en sus calles. Los vecinos de siempre conviven con un nuevo latido juvenil con gusto por las tendencias alternativas. Es el barrio de moda.
Y es que la oferta gastronómica ha sido responsable indiscutible de la propulsión de la zona. Los principales chefs valencianos han escogido Ruzafa para instalar sus restaurantes más atrevidos, como el “Canalla Bistró” de Ricard Camarena o “El Mercatbar” de Quique Dacosta.
También destacan sus Cervecerías Artesanales, como “Olhöps” o “Ruzanovol”, y sus Cafeterías con una tentadora oferta repostera, como “Dulce de Leche”, o “La Más Bonita”
A los comercios históricos también se han sumado propuestas culturales. Y cuando cae la noche, el ocio se abre paso en los pubs, mientras la música independiente suena en directo en las salas más pequeñas o se pincha en clubs de renombre.